En medio de un cruel invierno, un nativo americano es expulsado de la tribu con su familia, viéndose obligados a refugiarse lejos, en una vieja cabaña…
Pasan los días, y enloquecido por el hambre, el hombre arrebata la vida de su indefensa familia…
El escenario es grotesco: los restos de sus pequeños hijos y su mujer yacen esparcidos por el suelo, parcialmente devorados…
Al llevar a cabo el macabro crimen, el protagonista del mismo ha invocado al espíritu del Wendigo…
Ahora está maldito y condenado a convertirse en un ser perverso y repudiable…
El Wendigo
Poseído por el espíritu del Wendigo, se transforma en una criatura de aspecto raquítico (casi cadavérico) y de gran altura.
Con largas extremidades que terminan en delgados dedos con afiladas garras.
En su cabeza, brotan un par de cuernos similares a los de un alce y sus ojos son resplandecientes.
Su cráneo expuesto, ahora se representa como el de un animal, y sus grandes colmillos le permiten rasgar la carne humana de sus víctimas con facilidad…
Está cubierto de un pelo enmarañado, que se combina con algunos pedazos de piel putrefacta…
El Wendigo aumenta su tamaño conforme devora carne, por lo tanto, puede alcanzar alturas inconcebibles.
Su naturaleza híbrida le permite imitar voces humanas, para confundir a sus víctimas, y sus garras le permiten trepar con habilidad por los árboles, acechando a los viajeros en completo sigilo y sin dejar rastro.
Cortesia; El portal de las pesadillas.
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